Cuando esa mañana trágica escuché la noticia, “España en el Corazón” llegó al instante:
Y una mañana todo estaba ardiendo, y una mañana las hogueras salían de la tierra devorando seres, y desde entonces fuego, pólvora desde entonces, y desde entonces sangre. | Frente a vosotros he visto la sangre de España levantarse para ahogaros en una sola ola de orgullo y de cuchillos. |
Y nuevamente los españoles han respondido. En tres días, el triunfo de Aznar se convirtió en derrota. En tres días, los españoles terminaron con ese apoyo al unilateralismo que fundamenta el accionar norteamericano en Irak y que ha colocado a la humanidad ante una nueva guerra.
Con el triunfo de Rodriguez Zapatero el pueblo español “ahogó en una sola ola de orgullo” las mentiras y las manipulaciones de Bush, Blair y Aznar. El nuevo presidente de España ha rechazado el terrorismo, pero también la “guerra santa”, comprometiéndose a retirar los mil doscientos soldados que se encuentran en Irak y llamando a la autocrítica a aquellos que tocan los tambores de la guerra en el mundo: “ No se puede bombardear un pueblo por si acaso; no se puede organizar una guerra con mentiras", dijo Zapatero.
Ante el unilateralismo de Bush, el nuevo Presidente de España levanta su propia estrategia para enfrentar al terrorismo y proteger a los españoles.
El pueblo español hace un año salió a la calle para protestar contra la guerra. Fueron movilizaciones masivas que, como ha dicho Saramago, convirtieron a España en la capital moral de Europa. Lamentablemente, la premonición se hizo realidad y hoy día los costos del grave error político-militar de Bush los ha pagado un pueblo pacífico y progresista.
España le ha dado una lección al mundo. Hace un año con sus masivas movilizaciones en favor de la paz y hoy al derrotar al hombre de los norteamericanos en España, José María Aznar.
Ojalá los dirigentes de América Latina aprendan de esta España ciudadana.
Qué nuestros dirigentes levanten su voz para decir nó al imperio que tiene en el caos al Medio Oriente, que ha inventado el Plan Colombia, que desestabiliza a Chavez en Venezuela, que ha tendido un cerco irracional a los cubanos y que impuso a uno de sus lacayos en Haití.
Aprender de España es reencontrarse con Neruda, tenerla en el corazón, sufrir con el color de su sangre y desafiar, como los españoles, con orgullo y sin miedo, al poder hegemónico mundial que ha colocado a la humanidad frente a peligros cada vez más graves.
22-03-04
No hay comentarios:
Publicar un comentario